Recién renovado y rehabilitado.
Un paraje espectacular junto a Ardales, en Málaga.
He tenido la suerte de visitarlo justo después de su nueva apertura ya que llevaba casi 30 años cerrado al público.
Estaba muy deteriorado y aunque era casi un lugar de culto para los amantes de la escalada, había multas de hasta 6.000 euros por entrar.
Menos mal que ya está recuperado y abierto al público para que todos podamos disfrutar de esta maravilla de la naturaleza.